El botón mágico para que tu .TIF no pese una tonelada

El dilema.

Alguna vez habrás querido enviar un archivo en .TIF (o .TIFF, lo mismo da) a algún amigo o al que te va a imprimir el libro, pero entonces te das cuenta de que la dichosa foto pesa, yo que sé, 60 MB.

Una barbaridad.

¿Hay que pasarse necesariamente al JPG o a otro formato con mayor compresión? Pues no, el .TIF también tiene algunas opciones interesantes.

¡Comprime y no sufras!

Lempel-Ziv-Welch tuvo que ser un gran tipo para dar nombre al algoritmo de compresión mágica LZW, un método de compresión sin pérdida de calidad.

Repito, sin pérdida de calidad.

Así que puedes estar tranquilo. Cuando exportes o guardes el .TIF, selecciona “Compresión de imagen: LZW”. Y verás que tu archivo de 60 MB ahora pesa unos 12 MB.

¡Una maravilla!

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